jueves, 14 de junio de 2007

Matrix está cambiando

- ¿En que piensas? - me pregunta ella mientras juguetea con su pelo, de esa manera que antes me volvía loco
- En nada - respondo completamente ausente
- ¿Seguro? - vuelve a insistir, con un tono de preocupación que ultimamente me he acostumbrado a escuchar. Demasiado
- Matrix esta cambiando
- ¿Cómo? - se revela sorprendida
- Nada

Silencio. Distancia entre los dos. Cada vez mayor. Los silencios que antes nos unían, esos instantes incómodos que se convirtieron más tarde en momentos cómplices, preludio de estallidos de pasión, ahora nos separan. Hace mucho tiempo que hemos dejado de hablar. Pero no con palabras, si no con miradas, con gestos, con caricias... con besos. Algo que ya conocía. Matrix vuelve a cambiar, y con ese cambio se vuelven a repetir experiencias ya vividas.

Fue hermoso, sin duda. Tuvo momentos, como aquellos largos paseos bajo la luz de la luna del mas caluroso verano, en los cuales planeabamos un futuro que, porque negarlo, nos parecía que podíamos acariciar con la punta de los dedos. O aquellas tardes sin nada que hacer, pero en las que siempre se nos ocurría como utilizar el tiempo, navegando sobre olas de sudor y desenfreno.

- ¿Me quieres? - me dice con los ojos encharcados en temor
- Claro que sí. ¿Cómo puedes dudarlo?

La quiero. Más de lo que he querido nunca a nadie. Y me siento morir por dentro, cuando pienso que estoy viviendo un sueño, el más hermoso, pero algo me impulsa a despertar. Como si lo que vivo no fuera real. Solo una realidad inventada y puesta ante mis ojos. Por mi. Porque tenía que ser ella. ¿Quién si no? Tenia que ser ella. Lo repetí cientos de veces hasta que se convirtió en mi realidad.

Me abraza. Sabe que algo no va bien, pero aun no sabe el que. Me siento tremendamente culpable, porque mi traición no es física. Es mi alma la que la traiciona y no es justo, porque ella me ha dado todo.
Pero, ¿cómo podía saber yo que ella aparecería? Aquella que fabriqué con mis sueños. Aquella en la que te convertí a ti, inocente princesa, con toneladas de autoconvencimiento. Aquella con la que comparto ilusiones, que me inunda de alegría, que me devuelve la esperanza, que le inyecta adrenalina a mi corazón, reseco de inventar sentimientos no sentidos, de latir latidos desacompasados con los tuyos.

Teji un sueño sobre tu realidad, pensando que la realidad que soñaba no existía. Pero si existe y es hora de despertar. He visto las señales. Matrix esta cambiando y es hora de tomar la pastilla roja y descubrir lo que hay detras de la cortina de mi mente.

Ella aun no lo sabe. Casi ni la conozco, aunque siento todo lo contrario. No se si tan siquiera se plantea el llegar a quererme. Pero me da igual. Prefiero sufrir en vida, que seguir viviendo en sueño. Porque los sueños son hermosos, pero sueños son. Y antes o despues se despierta. Porque si no se vuelven pesadillas.

- ¿Nos vamos a la cama? - me pregunta
- Espera un segundo

No quiero recordarte como una pesadilla. Es por eso que ahora debo despertar.

Bloody marys en el bar
un dejavu
matrix está cambiando
por la confesión brutal
de tu relato....

Y yo no quiero volver
no me repitas jamás
que no sabes qué hora es
las 7 y 27 o no?
ya terminé....

No te echaré de menos en septiembre
verano muerto veré a las chicas pasar

Será
como aquella canción
de los años 80
seré
como el tipo que algún día fui

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